Otoplastia

Las orejas prominentes se suelen caracterizar por presentar una falta de definición del pliegue de antehélix, asociado muchas veces a una hipertrofia de la concha auricular con aumento del ángulo cefalo-conchal (ángulo que forman la cabeza y la parte posterior de la oreja). Es una variante que aparece desde el nacimiento y es con frecuencia motivo de burla en edad escolar, pudiendo provocar inseguridad, complejo y disminución de la autoestima.


¿En qué consiste la intervención?

Aunque hay muchas variantes, la deformación más frecuente es la falta de definición del antehélix, por lo que la intervención irá destinada a recrear este pliegue para de esta forma, hacer que la oreja quede más próxima a la cabeza. En los niños solemos realizar la intervención bajo anestesia general o sedación con un ingreso de una noche. En adultos la intervención se realiza generalmente bajo anestesia local y de forma ambulatoria.

¿Cómo es el postoperatorio?

No es doloroso. En los niños aconsejamos que utilicen una banda elástica las primeras semanas, mientras que en adultos la mantenemos 2-3 días y luego limitamos su uso a la noche.

¿La intervención deja cicatrices?

Las incisiones se ubican detrás de la oreja a nivel de la concha auricular, por lo que son prácticamente imperceptibles.

¿Cuándo puedo operar a mi hijo?

En general suelo aconsejar que sea el hijo el que comente su inquietud y esto suele ocurrir con la entrada en el colegio, por lo que una edad buena para intervenir a un niño, es a partir de los 4 años.